martes, 18 de julio de 2006

Entre ostras y pollos

Y es que, señoras y señores, hace un calor que ni en el mismísimo averno. Cosa que no acompaña a los quehaceres diarios de cada cuál, provocando hastío y ociosidad recortada.

¡Qué calor hace en la calle! Pues quedémonos en casita con el frío fresquito que emite el aire acondicionado, o con esa corrientecilla provocada por el ventilador de turno. Una vez en casa, dentro de un ambiente viciado como el que más, con una temperatura constantemente oscilando entre el cero absoluto y los 16000F, decides hacer algo. ¿Vemos una peli?

Pones la peli, coges una lata de la nevera y unos panchitos y te sientas en el sofá. Al cuarto de hora ya has dejado seco el refresco (o cerveza o similar) y los panchitos te provocan micro-regurgitaciones. A los siete cuartos de hora se acaba el infumable truño de superhéroes. ¡Bien!

Te levantas del sofá mientras notas cómo tu espalda se va despegando del respaldo cual cromo despegándose de un jersey. ¿Y ahora qué? ¿Salimos a tomar algo?

No hay dinero, y el poco que hay esperabas guardarlo para alguna cena tranquila en el restaurante chino de confianza, pero es que con este calor... ¡Camarero, un tubo con limón y una coca-cola de botella!

Cinco minutos después estás otra vez mirando al infinito con cara de asco, chorretón de sudor resbalando por la sien, convencido de Satanás está más fresquito que tú sentado en su trono hecho de calaveras humanas cocidas. Ya no sabes ni qué hacer. En su día soñabas con el verano, fantaseando con la cantidad de proyectos que ibas a hacer:

-Programar un videojuego de móvil.
-Acabarte aquél juego que ha cogido quince quilos de polvo.
-Leer Los Pilares de la Tierra.
-Acabar tus estudios extraoficiales.
-Plantar un árbol.

¡Y una mierda! Lo único que haces es estar sentado, viendo la tele, leyendo chorradas por internet o deseando que venga un pollo argelino y te pique un ojo para pasar a mejor vida; y es que, señoras y señores, no apetece hacer nada.

De ahí que estemos estos días entre aburridas ostras y pollos bien doraditos.

2 comentarios:

sands dijo...

LOL que razón tienes en todo lo que has dicho. Pero bueno tenemos que consolarnos pensando que en otros lugares (más al sur) hace muchísima más calor que aquí, así es que, aunque no lo parezca, no nos podemos quejar demasiado!

Anónimo dijo...

Me siento rajado en tu blog xD

PD: está muy bien escrito, si señor.